Leonardo DiCaprio es un buen actor y por lo general, su nombre en el afiche me hace querer ver -o al menos despierta mi interés en- una película. Ojo, no vayan a decir que es porque me gusta el tipo, porque hay muchos actores atractivos que son excelentes modelos en la gran pantalla y nada más.
Ahora, el otro día mi hermana me dice algo así como "oye, Leonardo DiCaprio siempre hace personajes que terminan mal" y nos pusimos a pensar en cuantas películas con él tienen finales felices como por ejemplo... eh... eh... eh... a sí, Atrápame si puedes, en la que luego de ser perseguido por dos horas (en el film, varios años), termina trabajando para quienes lo capturaron. Bueno, lo hago sonar peor de lo que es, pero el punto es que si la película en la que tu personaje termina mejor es aquella en la que no fue enviado a prisión (o al menos no de por vida), ni asesinado, ni congelado en el océano; podemos notar una tendencia...
Vamos a hablar de las más famosas (es decir, las que he visto), empezando por las más viejas. Está de más decirlo, pero hay spoilers involucrados en este post, aunque, ya a estas alturas no es sorprendente que un personaje de este actor acaba más muerto que los padres del héroe en una película de Disney:
Rápida y mortal (1995):
Un western -película del lejano oeste- en el que se enamora de la protagonista, una vaquera, en busca de venganza.
Pasan muchas cosas que no recuerdo bien porque tenía como diez años (lo cual no es excusa para no investigar, pero well) y a la final le pegan un tiro y se muere.
Romeo + Julieta (1996):
Bueno decir que Romeo se muere al final es un final tan sorpresivo como que el Titanic se hunde (pero de eso hablaremos luego). La ambientación es moderna pero dejaron los diálogos originales de la obra de Shakespeare (lo cual a algunos les pareció genial y a otros estupidísimo) y, como todo Romeo, DiCaprio debió morir al final.
Titanic (1997):
[Por favor imaginen My heart will go on de Celine Dion en el fondo o hagan clic aquí] Si en la película anterior sabíamos que su lápida ya estaba mandada a hacer, en esta ocasión, casi esperábamos que se salvara.
La primera vez que la vi no lloré porque estaba viéndola con mis amiguitos en el colegio (la maestra adelantaba todas las escenas interesantes) y la segunda vez me tocó verla en un autobús ejecutivo Puerto Ordaz-Caracas. Pero luego, alguna de las docenas de veces que la han pasado por televisión, se me fue una lagrimita cuando Rose deslizaba a Jack de su tabla en el mar como si fuera un surfista apartando un surfista una bola de algas.
Hasta ahora va un disparo, un envenenamiento y una hiportermia-ahogamiento. Y, casualmente siempre ha tenido algo que ver la pareja romántica de turno... Pero no todo es amor y besitos para Leo pues tres tristes mosqueteros también pueden sabotearle la fiesta.
El hombre de la máscara de hierro (1998):
Había una vez un rey que era el gemelo malvado de un joven prisionero al cual mantenían en un calabozo con una máscara de hierro llevando una vida horrorosa. Un día los tres mosqueteros, ya jubilados, decidieron hacer un exchange; si el rey era un imbécil y el otro tipo era tan chévere, ¿por qué no intercambiarlos?
Nadie en el reino se daría cuenta, ni siquiera el consejero real, el Doctor House, quien suele ser muy suspicaz.
A la final, el Leo que tuvo una vida espantosa terminó bien, pero el que había sido Rey, terminó preso con la máscara. Claro, después de los tres finales anteriores no suena tan mal, pero a nadie le gustaría estar en su lugar.
Pandillas de Nueva York (2002):
En 1846, en un Nueva York que haría a cualquiera querer mudarse a Caracas, Leo interpreta a Amsterdan, hijo de un hombre que fue asesinado por el actual lider pandillero de la ciudad. En busca de venganza, ya adulto, Amsterdan se une a una de las pandillas del tipo, y después de que su plan es descubierto y las revueltas enloquecen a la ciudad, combate en un duelo contra Bill (el tipo), quien es alcanzado por un proyectil fatal. En cierto modo, Leo acaba bien, aunque el proyectil le robó parte del crédito de la venganza (90%, diría yo).
Leo Leo, entre esta y Atrápame si puedes, del mismo año, estoy empezando a pensar que puedes tener un verdadero final feliz muy pronto...
El Aviador (2004): En el film biográfico sobre el multimillonario Howard Hughes, vemos a un personaje que hace realidad sus sueños, sale con mujeres hermosas, la gente lo admira y al final, su paranoia y trastorno obsesivo-compulsivo se salen de control.
Lo bueno: cuenta con el apoyo de mucha gente. Lo malo: La paranoia y el TOC. Lo feo: La escena del encierro y las botellas de leche llenas de pipí. En un balance general, diría que es un final agridulce.
Oye, las cosas parecen estar mejorando para Leo...
Los infiltrados (2006):
Leo es Billy, un joven policía encubierto en la mafia del sur de Boston, mientras que Colin, un joven mafioso encubierto en la policía, lleva también una doble vida.
Ambos bandos se dan cuenta de que hay un espía entre ellos y tanto Billy como Colin deben descubir la identidad del otro para salvarse.
Tal como en Romeo + Julieta, Billy muere (le pegan un tiro) y poco después le toca a su contraparte, aunque por razones muy distintas.
Diamante de sangre (2006):
En esta ocasión, Leo es un ex-mercenario de Zimbawe que busca un raro diamante rosado en Sierra Leona durante tiempos de guerra civil, mientras otro hombre también busca la misma piedra desesperadamente ¿qué podría salir bien?
A la final, en medio de un escape, le disparan, pero no muere inmediatamente y logra salvar al otro hombre que buscaba el diamante para ayudar a su familia, y luego muere.
Sé que después de esta película, hizo una llamada Red de Mentiras, que de verdad no la ví, y otra llamada Revolutionry Road que tampoco la vi (en ninguna muere, ya revisé).
La isla siniestra (2010):
Bueno, con este nombrecito... no le dicen "la isla feliz" o "la isla moderadamente soportable" así que veamos: Leo es enviado a investigar una instalación psiquiátrica junto a un compañero. Le pasan un montón de cosas horrendas y finalmente se da cuenta de que ya no es un investigador sino un interno con largo tiempo marcando tarjeta. A la final lo vemos alejarse al faro donde se supone que recibirá una lobotomía, aunque justo antes de partir, hace un comentario que deja dudas sobre si eso era realmente "necesario".
Inception (2010):
Esta la ví, pero siento que algunos puntos importantes me entraron por un ojo y me salieron por el otro. Básicamente, me acuerdo de edificios imposibles y gente entrando en sueños (incluida Juno y un señor japonés), y una camionetetica cayendo al mar. A la final, vemos que Cobb (Leo) logra reunirse con su familia -lo cual era su meta-, pero el trompito que solía usar para constatar que estaba en el mundo real y no en un sueño gira y gira, y la película termina sin dejarnos ver si -efectivamente- fue un final feliz, o fue un sueño, o estaba en Matrix o en el País de las Maravillas.
¿Qué nombre le habría puesto yo a esta película?: "Wake Them Fast", o por sus iniciales "WTF".
Bueno... recapitulemos...
De diez películas comentadas, Leo termina muerto en la mitad y de esas cinco, en tres es por causa de un disparo (Rápida y Mortal, Los Infiltrados y Diamante de Sangre), en una por congelación (Titanic) y en otra veneno (Romeo + Julieta). De las cinco en las que sobrevive, en dos se vuelve loco o algo por el estilo (El Aviador, La Isla Siniestra), en una cambia de calabozo a palacio y viceversa (gemelo y gemelo se switchean estadías) por lo que la califico como un final ying-yang (El Hombre de la máscara de Hierro), y en otra termina girando un trompo misterioso (Inception).
Leo, si dependiera de mí, ya te habrías ganado tu Oscar, por favor trata de hacer una peli más alegre en la que podamos apreciar la faceta tuya que ya en Internet se hizo famosa con el meme llamado "Strutting Leo" (la primera imagen es la foto original que comenzó el chiste):
Es más, les propongo un pequeño juego de bebida... Consigan una película de Leonardo DiCaprio y cada vez que su personaje sufra algún tipo de lesión tómense un shot (ojo, si van a ver Pandillas de Nueva York usen algo suave como Ponche Crema o vinito para no desmayarse tan rápido).